Rozagante cultura, amor por el pasado, entrega a la naturaleza y tradiciones trascendentales son los detalles que hacen de Valladolid un lugar tan increíble y único. Cuenta con un sin fin de actividades y atractivos por visitar y admirar, sin mencionar el ambiente tan tranquilo y majestuoso que brinda a los visitantes.
Si se da un paseo por las calles del pueblo se pueden observar las distintas construcciones religiosas, así como su famosa calzada y Plaza Principal; cada uno de estos lugares cuenta un fragmento de la historia local, como antiguos enfrentamientos o transformaciones, que en conjunto, relatan una historia épica sobre lo que aquí se ha vivido. Durante la noche se pueden observar increíbles proyecciones en sus edificios, para conocer más a profundidad sobre el rico pasado de Valladolid.
En los alrededores se da la oportunidad a los viajeros de conocer y convivir con una autentica comunidad maya, donde se puede aprender más sobre sus creencias y costumbres. Nadie debe perderse la oportunidad experimentar la tranquilidad y paz mental que brinda el relajarse en un cenote mientras se admira la belleza natural que lo formó. Al volver, es necesario probar las exquisitas especialidades locales.