Este paraje tiene altísimas paredes calizas, idóneas para escalar, también ofrece muros tapizados de agave y cactáceas, una variada fauna, matorrales verdes, encinares, bosques mixtos de encino y pino, pinares, valles de origen sedimentario llamados potreros y finalmente un manantial intermitente conocido en la región como “El Volcancito”, el cual es una caverna con una profundidad de alrededor de 25 a 30 metros con un diámetro de 3 a 5 metros.
El turista puede apreciar cascadas de diferentes tamaños, cristalinos arroyos y pozas que son aprovechados por los paseantes.

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