A lado del Rio Batopilas se encuentra la Hacienda San Miguel, la cual fue construida a finales del siglo XIX como lugar de residencia del ‘Magnate de Plata’ Alexander R. Shepherd y hacienda de beneficio de metales.
La Hacienda San Miguel es un inmueble de adobe que fuera propiedad de Estadunidense Alexander Robey Shepherd, que llegó a esta zona con la ilusión de hacerse rico, después de haber tenido que salir de su país natal, debido a que sus negocios y en su trabajo como político sufrió varias derrotas, por lo que decidió emigrar a México. En 1880 llegó a esta región como el director general de su propia compañía minera, ya que había utilizado sus ahorros para comprar todos los fundos mineros a la Wells, Fargo & Company, que explotaba las minas de la región, hasta esa época. En Batopilas volvió a conocer la opulencia y se ganó el apodo del Magnate de la Plata, al haber descubierto importantes vetas de este metal.

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